El piloto británico, Jenson Button y su actual escudería, Brawn GP, se han proclamado esta tarde en el Circuito de José Carlos Pace campeones del mundo de pilotos y de constructores respectivamente, en una carrera que gano el australiano Mark Webber.
Esta ha sido por lo tanto una tarde de triunfos para el equipo que nació a partir de la marcha del equipo japones, Honda de la Fórmula 1.
Al margen de esta excelente victoria por parte de un equipo que partía de cero bajo el mandato del genio inglés, Ross Brawn, hay que destacar de esta espectacular carrera el increíble trabajo de Lewis Hamilton, ganando posiciones sin descanso vuelta a vuelta hasta terminar tercero, el excelente debut de Kamuai Kobayashi en su primer gran premio y sin duda la labor de Sebastian Vettel, que en ningún momento pese a salir en la cola del grupo dio el titulo por perdido.
Al comienzo de la prueba en la curva de Senna se vivieron una innumerable cantidad de duelos que terminaron con hasta tres coches fuera de pista, entre ellos el del español Fernando Alonso, lo que obligó a salir al coche de seguridad y a nuetralizar la prueba durante algunas vueltas.
También fue monumental el enfado del italiano Jarno Trulli con Adrian Sutil.
El alemán de Force India perdió el control de su coche e impacto de frente contra las barreras del circuito paulista llevandose por delante en su viaje a Alonso que en esos instantes se encontraba trazando la curva y que pese a intentarlo no pudo esquivarlo, termiando como este atrapado en las escapatorias del trazado.
Fue por lo tanto un gran premio de batallas sin tregua y de emociones, que desde mi punto de vista quedarán por siempre en nuestras retinas. \\JGC-EMP//
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