El día que la Fórmula 1 cambio para siempre (En memoria de Ayrton Senna).

Amante del peligro, de la velocidad extrema, un maestro conduciendo bajo la lluvia, récords por doquier y el no tener piedad con sus rivales en la pista, son algunas de las características que definen mejor a Ayrton Senna. Hoy, el mundo llora aquel lamentable 1° de mayo de 1994, cuando en el Gran Premio de San Marino, el brasileño estrelló su Williams contra el muro de contención de la curva de Tamburello, mientras una barra de la suspensión le atravesó la visera de su casco y le ocasionó fracturas en el cráneo con pérdida de masa encefálica, terminando en su trágico fallecimiento. Al menos su tremendo accidente hizo que desde entonces la Federación Internacional de Automovilismo hiciera énfasis en mejorar la seguridad en los circuitos. Senna enfrentaba cada carrera como si fuera la última. Sus enfrentamientos en la pista con sus compañeros de equipo, como Nigel Mansell y Alain Prost, son los más recordados. Memorable fue el Gran Premio de Japón de 1990 donde golpeó el coche de Prost, quedando los dos fuera de carrera. Un año antes en 1989, en ese circuito, también colisionaron, cuando Senna intentaba adelantar a Prost y los dos monoplazas se estrellaron. Prost se retiró de la carrera pero Senna continuó, adelantó a Alessandro Nanini y se alzó con la victoria para, posteriormente, ser descalificado por el director de la prueba por haberse saltado en el choque la chicane. Finalmente, Prost se quedó con el título. El brasileño debutó en la Fórmula 1 con el equipo Toleman en 1984 y logró su primer podio en el Gran Premio de Mónaco. En 1985 firmó con Lotus donde logró 6 victorias en 3 años, y luchó por el campeonato en 1987. Entre 1988 y hasta 1993 formó parte de las filas de McLaren y en 1994 estuvo con Williams cuando finalmente murió. Sus tres campeonatos mundiales los consiguió en los años 88, 90 y 91. Al año siguiente de haber logrado su primera corona mundial, partió en todos los Grandes Premios en la primera fila de la parrilla. En una entrevista confesó que el venezolano Johnny Cecotto fue sin lugar a dudas su compañero de equipo más competitivo de todos. Agencia