
Los retrovisores se han convertido en una pieza aerodinámica más, a costa de reducir la visión trasera de los pilotos por las vibraciones a la que se ven sometidos y que causaron varios incidentes en el Gran Premio de Australia al obstaculizar unos pilotos a otros tanto en la sesiones de entrenamientos libres como en la de clasificación.
Mientras Pedro de la Rosa, que hasta Australia fue presidente de la Asociación de Pilotos de Grandes Premios (GPDA), es consciente de su falta de visibilidad, el brasileño Felipe Massa afirma que los de Ferrari proporcionan una gran visión y al alemán Sebastian Vettel (Red Bull-Renault) le preocupa la incidencia que este cambio pueda tener en el rendimiento aerodinámico del coche. EFE
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